CONCLUSIÓN FINAL DEL TEMA
Nuestra coyuntura, tiene cuatro
principales objetos de estudio: La Familia, Niñez, Adolescencia y Vejez. A
través del desarrollo y seguimiento que le hemos hecho a estas poblaciones en
Bogotá; nos hemos dado cuenta de lo siguiente: Respecto a la familia, hemos
notado principalmente que el imaginario colectivo que se tiene de la
constitución y estructura familiar, no pertenece a la realidad que por medio de
nuestros análisis hemos concientizado. Así pues, se puede comenzar a ver a la familia
como una institución diversa, debido a los diversos hechos sociales.
Los niños en Bogotá,
tradicionalmente, están inmersos en la lógica del progreso y producción. Esto,
los invalida como sujetos útiles a la sociedad. Es decir, existe un discurso ya
consolidados de que los niños no son ciudadanos, y por lo tanto, no tienen el
derecho de la participación. Por eso, se aísla a la población infantil, de una
manera radical. Por lo anterior, destacamos en nuestra investigación las nuevas
labores que se están haciendo de integración infantil a través del gobierno y
el distrito. Se empezó a tener en cuenta a la población infantil, no como el
futuro, sino, como el presente de la sociedad.
Luego, en este orden, estaría
la adolescencia. En esta población, nos encontramos con una tendencia bastante
amplia por la vulnerabilidad. Esto quiere decir, que esta población es la más
propensa a actos de violencia; pandillismo, delincuencia común, acceso a las
drogas, violencia sexual entre otras son las principales problemáticas que
rodean a la juventud bogotana. Esto se da, principalmente, porque el estado de
adolescencia no tiene la inclusión social que debería, al ser un estado de
transición sensible a los estímulos sociales. Con ello, queremos referirnos a
la necesidad del hallazgo de una identidad consolidada y estable.
La vejez constituye un panorama
similar al de la infancia. Por ejemplo, la figura del anciano ha cambiado de
estatus debido a la noción social de progreso y de producción de la urbe. La
condición biológica y física, no permite que brinde a la producción económica la
utilidad que un sujeto “debería” cumplir. Eso sin contar, que cuando estas
condiciones aún siguen vigentes, las políticas públicas los segregan. Esto se
evidencia, en todos los problemas de los adultos mayores con las pensiones en
Bogotá.
La relación de todos estos
integrantes, constituyen los factores determinantes de una cotidianidad
bogotana, que los une como diversos y como un presente concreto. Aún la
sociedad bogotana tiene que hacer serios cambios de su imaginario colectivo, en
la inclusión y participación social de estas poblaciones.
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