Después de doce semanas
Después de haber tenido un seguimiento de la capital Colombiana durante alrededor de doce semanas en cuanto al medio ambiente y sus problemáticas. Analizamos la información de diferentes medios como: Canal Capital, Secretaria distrital de ambiente, El POT, El espacio, El espectador, El tiempo, entre otros. Para así, poder tener una amplia mirada y diferentes versiones de lo hechos y tener un clara postura.
De este modo, nos dimos cuenta que los riesgos naturales presentados en Bogotá, en realidad no son naturales. Es decir, los peligros que presentan miles de familias en cuanto al medio ambiente y su entorno, no se le pueden adjudicar a la naturaleza, son más bien derivados de procesos administrativos y sociales, como ocurrió con las alertas de la inundaciones del río Fucha en la semana del 26 de febrero, los permanentes afectados por el basurero de Doña Juana. Mencionando antes que los afectados son personas de estratos uno y dos. En esa medida pareciera como si se estuvieran perpetuando las clases sociales, porque cuando el gobierno actúa para poder seguir un plan de ordenamiento territorial, lo hace mediante represiones como lo fue el despojo de mil personas en la localidad de Suba con un discurso político de conservación ambiental. Entonces, cuando analizamos todas estas circunstancias tuvimos en cuenta que las condiciones coyunturales no son culpa del gobierno local, pero sí es su labor reubicarlas dignamente, previniendo que sufran condiciones de este tipo.
Por otro lado en dos salidas de campo que realizamos nos dimos cuenta de cosas que se mencionamos en el anterior párrafo; como el uso del discurso político frente al medio ambiente y las personas afectadas que en su mayoría son quienes habitan en lugares de estratos uno y dos; la primera fue a Ciudad Bolívar para identificar el acceso al agua potable que tienen los habitantes del barrio Santo Domingo en donde se encuentra uno de los taques que la alcaldía inauguró para el almacenamiento de agua potable que se distribuye a la población pero este trabajo no está completo pues hace falta un acueducto que conecte el tanque con las casas de las personas y un contador para el registro de la misma. En cuanto al discurso político la segunda salida de campo fue el Humedal El Salitre de ahí nos queda la duda de cuáles son los beneficios e intereses de tener seguridad privada y acceso restringido a este lugar.
Un tema de gran preocupación es el de la contaminación del aire y del río Bogotá, pues se ha incrementado el índice de contaminación del aire, y el río Bogotá. En esta administración no se ha tenido tanta importancia como en la anterior en la cual se descontaminó un porcentaje significativo del río. A la contaminación del aire se le suma un negativo y es la tala de árboles y los incendios forestales que se presentan a principio de año.
Para finalizar otras noticias de medio ambiente en estos meses son acerca del trabajo de los recicladores; y como ellos están luchando por el reconocimiento a su labor y el trato digno, las invenciones de alternativas como casas ecológicas, ecobarrios, cajas para la exportación de flores elaboradas con los residuos de las flores, reforestación de bosques y la forma de elaborar cerveza para menor contaminación del agua. Todas estas iniciativas principalmente de ciudadanos y universidades, una que otra empresa privada y la alcaldía mayor de Bogotá.
Sin embargo, en resumidas cuentas, todos nos preocupamos por el cambio climático, con asuntos como la contaminación del aire, de los ríos, las lluvias intensas a lo largo de todo el año (antes no era así). Pero en realidad no muchos actuamos para el bien de esta problemática y menos se ven intenciones ambiciosas por parte del gobierno. Las esperanzas de poder cambiar nuestro estilo de vida, crecen en individualidades, en casas sostenibles que son privadas. Por lo tanto, el discurso que nos han metido sobre la responsabilidad del medio ambiente, se quedan entredicho porque todos seguimos consumiendo del mismo modo. Nosotros creemos que para que haya una verdadera transformación, tiene que haber una intervención oficial, es decir, las medidas deben ser provenientes de la ley. Debería restringir el uso del carro aún más, el agua debería tener un mayor control para poder prepararnos a lo que se supone que se avecina.
