Bitácora III: Deslizamiento en Doña Juana.

Hola queridxs lectores, esperamos estén sobrellevando muy bien éstos días de cuarentena.
Para el tema de ésta bitácora nos hemos cuestionado sobre ¿por qué el derrame del vertedero de Doña Juana pasó a penas inadvertida en los medios de comunicación si se ha intentado hablar ya sobre su vulnerabilidad y las afecciones que está generando a los ciudadanos que se encuentran aledaños a DJ?

Así pues, hoy, queremos hablarles un poco del impacto que genera y ha generado el relleno de Doña Juana, hacer un breve recuento de su inicio, sus principales falencias, y las consecuencias que estas generan sobre sí mismo, y sobre la comunidad. 

Doña Juana es el principal vertedero del distrito capital de Bogotá, ubicado al sur de ésta, en la localidad de Ciudad Bolívar. Entró en operación el 1ro de noviembre de 1988 tras una breve crisis sanitaria debido a la clausura de botaderos como el de El Cortijo y Gibraltar.

Desde entonces el relleno a pasado por distintas administraciones, algunas públicas otras privadas que en su momento favorecieron y fortalecieron el sistema de aseo y recolección en la ciudad de Bogotá. A pesar de que el relleno cuenta con adecuación de suelos, filtros, canales de conducción, hace compactación de desechos  junto  con una cobertura de cal y arcilla más algunas chimeneas subterráneas en para la extracción de energía de los gases que genera la descomposición, sin embargo, a la hora de tomar la decisión de la ubicación de dicho relleno no se tuvo en cuenta la expansión inminente del distrito capital. 
Así fue, durante los años de 1997, 2015 y el pasado 28 de abril hubo deslizamientos que afectaron fuertemente a las localidades más cercanas, y en su momento también el río Tunjuelito debido a grandes cantidades de desechos junto con la falta de tecnología y maquinaria para agilizar la recolección de los mismos. Actualmente ésta  zona entre los cerros de Mochuelo (alto y bajo) es una de las zonas principalmente afectadas debido a esta expansión, pues es la localidad más cercana al relleno, expuestos a malos olores, fuentes de infecciones, vectores de transmisión, etc.

El problema de los residuos es debido a sus grandes volúmenes, la falta de compromiso y disciplina en la ciudadanía para hacer selección y reciclaje de los deshechos.
(Independiente de las malas administraciones en la alcaldía, y pésimos operadores del relleno que han generado la acumulación de fallas dentro del proceso de eliminación de deshechos haciendo que este sencillamente colapse).

Desde la opinión de la SSPPD (superintendencia de servicios públicos domiciliarios) hacia la CGR (compañía de geranciamiento de recursos), ésta afirma que existen dos formas de disposición de los residuos, adecuada, que se da por rellenos sanitarios y campos de contingencia, y luego la inadecuada que se da por quemas, enterramientos, botaderos en cuerpos de agua o en espacios de cielo abierto. Para evitar emergencias como la del 2015, el gobierno generó campañas de concientización para el reciclaje, el problema de ésto es que el tiempo aproximado para que se genere una apropiación de este hábito en la ciudadanía es de un espectro de aproximadamente 30 años, que para entonces podría significar una nueva emergencia sanitaría. 

La cuestión es que a pesar de que se hicieran las adecuaciones necesarias, para, como dijo un ex-alcalde mayor, ampliar el rango de utilidad del relleno aproximadamente 35 años más, si no se toman medidas legales y culturales, este tipo de problemas se puede seguir presentando, ya que la solución no será construir más rellenos en el perímetro de Bogotá, sino crear conciencia ciudadana para que así se genere la capacidad individual de respetar, y preservar el medio ambiente aplicando el uso de las 3R ya propuesto en los decretos 1677 de 2015 y 1784 de 2017, donde, a manera resumida, dice que el adecuado manejo de los residuos se dan después de pasar por un proceso de Reducción, reutilización, y reciclaje. Así pues mis queridxs lectores, tengan en cuenta que si desean ayudar al medio ambiente lo pueden hacer desde casa aplicando esas tres reglas básicas para empezar a hacer la diferencia.